Hola a todos!
Hoy vengo para intercambiar mis impresiones sobre el álbum ...And Then There Were Three.... Como es habitual, la versión que he adquirido es la 2007 Digital Remaster. Lo he adquirido en Play.com a un coste de 11,99 EUR, siendo el álbum de un sólo CD más caro adquirido hasta ahora. Por primera vez he tenido una incidencia con Play.com, no en el envío -que tardó los habituales 7-8 días- , sino que al escuchar el disco me he dado cuenta de que el ordenador no lo reproducía bien, se quedaba parado y daba saltos en la reproducción del contenido. Tras inspeccionar la cara plateada del disco me he dado cuenta de que tenía algo similar a un aura o brillo (a modo de manchas) pero no en superficie, sino como si se hubiera quemado la capa interna al grabar el disco. Tras esto, localicé la plataforma de devoluciones de Play.com, donde ellos me facilitaron la etiqueta del envío. Lo mandé por Correos certificado con un coste de 6 EUR. El envío de devolución solo tiene franqueo prepagado para envíos con origen y destino Reino Unido. A los demás se les ingresa en la tarjeta con la que compraron 2 EUR en concepto de envío. Mi problema es que al utilizar tarjetas virtuales para el pago, una vez utilizadas no pueden volverse a utilizar, por lo que el ingreso no me llegó.
En efecto, Play.com me remitió otro CD nuevo idéntico y precintado en unos días. El problema es que al abrirlo vi que también tenía la mancha maldita. Volverlo a enviar no me salía rentable, porque habría pagado más de lo que vale comprarlo nuevo en otro sitio distinto. Además entiendo que es una remesa de CDs que han salido mal grabados, por lo que si lo volvía a comprar allí tendría el mismo problema. Probé a ripearlo, como habitualmente hago, pero tampoco se podía. Intenté hacer una copia 1:1, al vuelo, y aunque tardó mucho más de lo habitual, al final se hizo. La copia no presentaba ese problema, por lo que estaba salvado. Con el tiempo quizá adquiera otro disco original, aunque de momento me sirve con la copia del original. Este incidente me vuelve a plantear la posibilidad de cambiar de distribuidor por otro de similares características (Amazon, por ejemplo). Este tipo de problemas son la única ventaja de comprar en establecimientos tipo Fnac o El Corte Inglés, aunque evidentemente no compensa el precio. He ahorrado lo suficiente comprando en Play.com como para comprarme otro disco de ...And Then There Were Three... en otra tienda sin dejar de ahorrar dinero.
Por lo que respecta al contenido del álbum en sí, ...And Then There Were Three... me ha sorprendido muy gratamente. El título se debe a la reciente partida de Steve Hackett del grupo, quedando únicamente tres integrantes. Quizá llevaba una predisposición negativa a escucharlo, no sé muy bien por qué. Imagino que porque me dejo llevar por las habladurías populares que dicen que la era Phil Collins es de peor calidad artística que la era Peter Gabriel. Hasta el momento tengo que decir que esto es totalmente falso. Prueba de ello es este excelente trabajo, compuesto por 11 pistas. A pesar de que mantengo mi teoría de que a mayor número de pistas, peor calidad del álbum, ...And Then There Were Three... consigue un efecto impresionante la primera vez que lo escuchas. Es un efecto que nunca había escuchado en un CD de Genesis. Consiste en que cuando estoy escuchando cada pista, tengo la total impresión de que la pista le resulta familiar, como si ya la hubiera escuchado antes. Evidentemente cabe mencionar que la única pista que había escuchado con anterioridad es Follow You Follow Me.
No hay que confundir este efecto -muy difícil de conseguir- con el hecho de que una canción sea predecible por su estructura musical (como ocurre en muchas de las canciones modernas de música pop, dance y otros géneros). El hecho de que todas las canciones de un artista suenen parecido no tiene nada que ver con este efecto que comento. Este álbum tiene esa característica que lo hace único.
En general, el sonido de ...And Then There Were Three... es diferente al que se ha escuchado hasta ahora. Digamos que es un sonido más moderno, más mezclado y quizá menos puramente instrumental, sin llegar a ser electrónico ni mucho menos. En ese aspecto sí que noto un cambio de rumbo respecto a los álbumes recientes como A Trick Of The Tail o Wind & Wuthering, teniendo éstos últimos un sonido mucho más natural.
Respecto al contenido, el álbum se estructura en 11 pistas. La primera de ellas es Down And Out, una pista rápida con fuerte base de batería. Comienza con unas suaves notas del teclado de Banks en modo strings. Seguidamente entra una vigorosa batería que hace de Down And Out una gran pista de apertura. El esquema musical se mantiene constante a lo largo de la pista, manteniendo un aire rápido pero no alegre, más bien algo oscuro -intimidante-. Down And Out fue compuesta conjuntamente por el grupo.
La segunda pista es Undertow. La primera vez que la he escuchado me ha dejado impresionado debido al efecto que causó en mí -parecía como si ya la hubiera escuchado antes-. Está compuesta exclusivamente por Tony Banks. Se trata de una pista lenta, algo más parecido a una balada en cuanto a ritmo se refiere. Hay una comunión perfecta entre el piano de Banks, el bajo y guitarras de Rutherford y la voz de Collins. En 1:20 llega el estribillo. Impresionante. Transmite una fuerza y emoción que sólo la música puede transmitir. El efecto mágico que tiene la voz de Collins en el mismo resulta evidente nada más escucharla. Es como si te debilitara y alejara los problemas por un momento. Simplemente mágico. Me parece una de las mejores pistas del álbum.
Tras esta magnífica pista llega Ballad Of Big, a una pista compuesta conjuntamente por el grupo. Tras una breve y suave introducción, en 0:35, la pista adopta el ritmo que mantendrá durante toda a pista. Un ritmo con base de batería que se altera en el estribillo donde acude el órgano de Banks para dotar a Ballad Of Big de un aire más lento. Ballad Of Big me resulta menos compleja que las dos pistas precedentes.
Snowbound es la cuarta pista. Está compuesta por Mike Rutherford, hecho que se vuelve evidente en su marcada base de guitarra eléctrica (sin distorsión, en modo limpio). Se trata de una balada lenta. Desde el inicio hasta 1:15, únicamente tienen lugar las guitarras de Rutherford y la voz de Collins con un discreto acompañamiento del órgano de Banks. En 1:15 llega el estribillo, donde la pista da un giro y adquiere una fuerza y magestuosidad muy similar a la escuchada en Undertow. Escucho sin problemas el bajo con pedal de Mike Rutherford durante el estribillo, lo que ayuda a obtener ese aire mágico, como ocurría también en Afterglow. Por lo demás es una pista simple en composición, pero con un acabado final impresionante.
La quinta pista es Burning Rope. Para mí se trata de la mejor pista con diferencia del álbum. Se trata también de la pista más progresiva del mismo y también la más larga, con 7 minutos y 11 segundos. Compuesta, cómo no, por Tony Banks. Mientras escribo estas líneas me voy dando cuenta (confirmando, más bien) que el cerebro de Genesis reside en este hombre. Es el mago de la composición sin dudas. El comienzo de la pista ya sienta las bases de una unión perfecta entre la batería (especialmente en 0:30), la guitarra distorsionada de Mike y los órganos de Banks. En 0:45, entra la melodía principal de la pista y en 1:12 la voz de Collins. De nuevo en cuanto sonó la citada melodía tuve la sensación de que la había escuchado con anterioridad. En 3:09 se repite la melodía de apertura de la pista para dar lugar a un breve solo del sintetizador de Banks, emulando de alguna forma el efecto mágico de la flauta de Peter Gabriel. Tras esto llega uno de los mejores solos de guitarra eléctrica, junto con el de Firth Of Fifth y Ripples... Me parece simplemente magnífico. Es más corto y simple que los citados, pero su inclusión hace de Burning Rope una pista excepcional. Ya he buscado la tablatura para aprender a tocarlo en guitarra. En 5:20 aparece nuevamente la melodía principal de la pista para conducirnos hasta el final de la misma. Burning Rope es alucinante.
Deep In The Motherlode es la sexta pista. Es una de las pistas que menos efectos estéreo tiene. En mi opinión suena casi sin mezcla estéreo, con un sonido un tanto atenuado, como si se escuchara detrás de un cristal grueso. No me refiero a que suene a un nivel bajo de volumen, sino que suenan todos los instrumentos al mismo volumen y sin mezcla estéreo apreciable entre ellos. Esto le resta un poco de calidad técnica. La pista comienza con una estructura basada en sintetizador electrónico que mantiene constante hasta 2:02, donde se torna un poco más íntima, dejando una suave guitarra eléctrica junto con la voz de Collins. En 3:22 vuelve la composición del comienzo de la pista, que se mantiene hasta el final de la misma. La pista está íntegramente compuesta por Mike Rutherford. En lo personal, me parece una pista algo simple y con escasa trascendencia.
Many Too Many es la pista que escuchamos a continuación. Comienza con una suave introducción de piano junto con la voz principal de Phil, el bajo también les acompaña. Many Too Many se trata de una balada romántica, con una composición muy compacta y repetitiva que otorga el aire de pista contemporánea, de corta duración (3:31) y con matices tristes propios de este tipo de baladas. Es una canción musicalmente triste, que transmite sentimientos apesadumbrados.
Todo lo contrario encontramos en Scenes From A Night's Dream. Se trata de la octava pista del álbum y una de las más alegres del álbum musicalmente hablando. Compuesta por Banks y Collins, comienza con un ritmo acelerado y alegre, donde participan por igual todos los instrumentos. Aunque el esquema se mantiene constante durante toda la pista, no se hace pesada de escuchar. Destaco un detalle que me resulta curioso. Aunque es algo más corta que Many Too Many (3:29 frente a 3:31), Scenes From A Night's Dream me parece mucho más larga debido a su acelerado ritmo que transmite al oyente la sensación de que han pasado más cosas en la pista. Es un efecto similar a contar una historia deprisa, donde -por segundo- se transmiten más palabras en el mismo tiempo. Creo que con la música resulta algo similar.
Say It's All Right Joe es la novena pista. La pista tiene dos secciones o partes muy diferenciadas. La primera comienza al inicio de la pista con una sección musicalmente lenta, donde destaca especialmente el versátil bajo de Mike Rutherford. En 1:22, la pista adopta un ritmo más rápido donde se produce una explosión musical que desata un breve alarde de compenetración entre los instrumentos. En 2:09 volvemos a la primera parte, exactamente igual que al comienzo. Nuevamente en 2:57 se entra en la segunda parte. No me parece una pista trascendente, aunque el cambio entre parte lenta y parte rápida me resulta agradable e impredecible las primeras veces que se escucha.
The Lady Lies es la siguiente pista. Me gusta mucho por lo inusual de su composición. La pista comienza como si de una fiesta folclórica se tratase, pronto adopta un ritmo simpático donde el bajo resulta excepcional. En 0:41 la distorsión de guitarra es notable. He de decir que la doble voz de Collins (en ciertas partes se nota una voz más grave que la otra, ambas simultáneas) trasmite un efecto perfecto. La batería también está a la altura durante toda la pista interpretando gran cantidad de complejidades. En 2:40 comienza la sección instrumental que hace de The Lady Lies una pista trascendente, distinta a las demás, superior musicalmente hablando. En esta sección se ubica un solo de órgano fabuloso de Tony Banks, acompañado por la batería y la guitarra. La sección se extiende hasta 3:47 donde se detiene y se hace especialmente evidente la doble voz de Collins. En este punto vuelve nuevamente a la composición anterior y al mismo esquema musical, que se mantiene hasta sus 6 minutos y 8 segundos de duración. Junto con Burning Rope me parere lo mejor del álbum. Al igual que la citada pista, está compuesta por Banks.
Follow You Follow Me es la última pista del álbum y la única que había escuchado con anterioridad. Se trata de una bonita balada romántica de corta duración. Está compuesta conjuntamente por el grupo donde consiguen transmitir un sentimiento único hasta el momento: declaración de amor. Aunque otras pistas de Genesis habían tocado mucho el tema, ninguna -a mi entender- consigue mandar un mensaje tan claro. Es una pista simple, simplísima, en su composición pero trementamente efectiva. Prueba de ello es que fue un éxito en su año de lanzamiento, éxito que aprovecharía el grupo para seguir haciendo pistas más inteligibles por la gente. A pesar de su simplismo, me gusta mucho por conseguir -con tan poco- un efecto tan bonito. Me encanta. Quizá lo más destacable es el extraño efecto conseguido con la guitarra en el comienzo de la pista, que se mantiene durante toda ella.
En general, ...And Then There Were Three... me parece un álbum muy bueno. No es el mejor, pero tampoco el peor, de los escuchados hasta ahora. Tiene la característica de haber conseguido hacer un álbum muy bueno con 11 pistas, que son bastantes para lo habitual en ellos. Desmiento totalmente que la era Phil Collins (al menos hasta este álbum) sea de peor calidad artística y técnica que la era Peter Gabriel. Mis pistas preferidas son Burning Rope, The Lady Lies y Follow You Follow Me. Por todo ello, creo que CUATRO ESTRELLAS es una calificación adecuada para este álbum.
El próximo álbum es Duke, he oído hablar de él, a ver qué cosas nos depara. Antes de despedirme quiero comentar que he visto en YouTube unos vídeos de unas grabaciones en directo de la gira de este álbum. Di con ello porque vi una grabación de Dancing With The Moonlit Knight cantada por Collins, cosa que no estaba en Seconds Out, y según parece era la única grabación que existía. Tal fue mi curiosidad que encontré un lanzamiento no oficial que se hizo con un concierto en el Uptown Theatre el 13 de Octubre del 1978. Tras buscar por todo Internet, he conseguido adquirir los dos CDs de que consta la grabación. No tengo palabras para describir la autenticidad de la grabación. Estoy en la disyuntiva de analizar dicho lanzamiento, aunque no sea oficial, antes de Duke -que es su lugar en el tiempo-. El asunto es que en el lanzamiento Genesis Live CD/DVD Box Set que se hizo en 2007, se ha incluido un DVD de audio (sólo audio) con este concierto remasterizado. Por ello, pospongo su análisis hasta entonces. Solo digo que si Live me pareció genuino por el sonido tan característico, Live USA me resulta mil veces más genuino. Es simplemente perfecto. Una joya complicada de conseguir por Internet, pero que merece la pena.
¡Nos vemos en Duke!