domingo, 29 de julio de 2012

Invisible Touch (1986)

Hola a todos,

Tras un tiempo sin escribir por varias causas personales, aquí vuelvo con el análisis de tan personalmente aclamado álbum: Invisible Touch. Fue lanzado en 1986, tres años más tarde que el anterior álbum, Genesis.

El sonido del álbum me resulta tremendamente familiar dado que es con diferencia el álbum que primero escuché. Me trae infinidad de recuerdos a la mente como si fuera ayer cuando estaba en la terraza del apartamento de mis padres escuchando, como cada noche, este álbum.

Entrando en materia, el álbum se compone de ocho pistas. El grupo parece que abandona la idea de hacer discos con bastantes más pistas y vuelve al carácter progresivo de épocas anteriores. Aunque me sorprende la idea que leo a menudo en Internet de que Invisible Touch es un álbum pop, tengo que decir que no la comparto en absoluto. Tiene un marcado carácter progresivo, con sonido más moderno, pero igualmente progresivo. Dicho carácter está presente en varias pistas del álbum.

La primera pista es Invisible Touch. Sí es cierto que ésta es la pista que tiene un carácter más pop, o predecible, de todo el álbum. Es la cuarta vez que una pista adopta el título del álbum al que pertenece, tras The Lamb Lies Down On Broadway, A Trick Of A Tail y Abacab. La pista ya comienza con la melodía que le acompaña y le da forma. En lo personal me resulta muy alegre en cuanto a ritmo y entonación, aunque es ciertamente repetitiva. No obstante, en 1:44, encontramos una breve pausa musical que nos da un respiro entre las sucesivas repeticiones del estribillo. En 2:43 encontramos un recurso muy habitual en el pop, repetir un par de veces el estribillo un par de tonos más agudo al final de la interpretación, a modo de coda. La canción finaliza en 3:30 dando la sensación de ser más de lo que realmente es. En cuanto a composición la veo igualmente simple y de escasa dificultad.

La segunda pista es todo lo contrario. Tonight, tonight, tonight nos muestra un lado oscuro y ciertamente progresivo. Comienza con un marcado ritmo de batería al que pronto se añade un sintetizador manejado por Banks y la voz de Collins, con la reverberación que ya incorporaron en el anterior trabajo. Desde el comienzo, el desarrollo de la pista es lento y predecible, pero únicamente hasta 3:16, donde se desarrolla una sección musical de 1 minuto y 50 segundos de duración. Esta sección se compone de un ritmo constante junto con infinidad de sonidos tenebrosos que nos hacen pensar que estamos en una película de suspense. En 4:19 los órganos van tomando presencia lentamente y con mucha efectividad, dando a esta sección un carácter único. En 5:06 volvemos de nuevo al sonido del comienzo de la pista para acabar de esta misma manera. Creo que el final de la pista podría haberse acortado, pues la coda es excesivamente larga, ya que la pista concluye en 8:53 siendo una de las pistas más largas de los últimos álbumes.

Land Of Confusion es la tercera pista. Una imprescindible del grupo y ersonalmente la favorita del álbum junto con Domino. Estridente y eléctrica, es una pista que sabe combinar muy bien los nuevos sonidos. La batería, acústica en vez de electrónica, abre la pista con varios golpeos del snare drum dando un carácter de potencia y rapidez muy dignos. El sonido de la guitarra eléctrica con distorsión, unido al tono vocal agudo y algo estridente de Collins confeccionan la propia identidad de la pista. Las letras tratan sobre la incertidumbre vivida en la Guerra Fría. Este hecho se recalcó en el videoclip de la misma, que ganó el premio Grammy en 1988. Volviendo a la pista, en 2:23 se produce un cambio en la situación de la pista y, aunque el ritmo -si uno presta atención- es el mismo, sin duda parece que la canción se ralentice. Un efecto muy bien conseguido. En 3:00 encontramos un breve puente que nos conecta, bateŕia fabulosa mediante, con la sección final de la pista. Al contrario que Invisible Touch, Land Of Confusion parece más larga de lo que es realmente.

La cuarta pista es In Too Deep. Se trata de una balada romántica al más puro estilo Phil Collins. Me la imagino como una evolución de That's All, del album anterior. Es una pista lenta, que contrasta con la anterior precisamente en eso. El grupo sabe jugar muy bien con la entonación de Phil y crean una canción muy bonita de una idea bastante simple. Cuando era pequeño me encantaba, aunque ahora que la escucho habiendo escuchado trabajos enormemente grandiosos, ésta se queda muy atrás.

Anything She Does es la quinta pista de este álbum. Hasta que me he parado a analizar el álbum nunca había caído en la cuenta de que es una pista muy parecida a Invisible Touch. Al igual que el resto del álbum, tiene una sonoridad muy eléctrica y estridente. La composición es muy básica, basándose en un esquema verso-estribillo-verso-estribillo... En lo personal, me trae buenos recuerdos, junto con el resto del álbum, aunque no creo que sea un trabajo extraordinario en cuanto a composición ni ejecución.

La cosa cambia con Domino, la sexta pista. Según la inscripción de la parte trasera de la caja del CD, la pista está nominalmente dividida en dos partes:

1. In the Glow of the Night
2. The Last Domino

No existe pausa musical entre ambas partes, ni tampoco separación de pistas. Es un caso muy similar a One For The Vine, donde claramente hay dos partes bien diferenciadas pero que no dejan de ser secciones de una misma pista. En cuanto a la pista se refiere, es la más progresiva del álbum con diferencia, incluso más que Tonight, tonight, tonight. In The Glow Of The Night comienza con un suave órgano de Banks y una guitarra rítmica bien conducida por Rutherford. En 0:33 ya deja claro que no va a ser una pista como las demás, al introducir una atmósfera como las de antaño. Esto queda perfectamente confirmado en 0:58, cuando una simple batería con reverb, unido a un poderoso Collins y un discreto pero efectivo Banks golpean con el mazo de la grandeza a Domino convirtiéndola en una pista imprescindible en la discografía de Genesis. En 2:15 nuevamente se repite la grandeza musical de 0:58, confirmando la sensación de estar en una atmósfera no terrenal, al menos en el terreno musical.

En 0:35 la batería se detiene quedando "únicamente" la voz reverberada de Collins y un suave órgano de Banks. Siempre recordaré el "forever" que canta Phil entre los breves segundos comprendidos entre 4:12 y 4:16 pues, además de ser muy bonito, es el preámbulo de lo que se nos viene encima. Justo en este instante comienza la segunda parte, The Last Domino, marcada por una constante y contundente batería e infinidad de sonidos tenebrosos sintetizados por Banks, que recuerdan a los escuchados en Genesis (álbum). A partir de que Collins efectúe su entrada en la parte vocal, la pista se desarrolla con intensidad constante y poderosas pausas musicales combinadas con breves secciones instrumentales. Domino concluye a los 10 minutos y 45 segundos tras una larga coda. Sin duda una pista imprescindible.

Throwing It All Away es la pista numero siete. Se trata de una balada romántica al mismo estilo que In Too Deep. La pista comienza con una melodía marcada por la guitarra eléctrica de Mike Rutherford y la aportación vocal de Collins. Pronto llegamos al estribillo, en 1:02, para repetir el mismo esquema hasta el final. Me resulta una pista muy simple y desde que la escuché le tuve bastante aprecio. Sé que no es ni de lejos la mejor pista que Genesis haya hecho, ni siquiera en este álbum, pero tiene algo que me hace recordar viejos momentos con mucha melancolía. Es algo personal.

The Brazilian cierra el álbum. Se trata de una pista 100% instrumental, sin parte vocal alguna. Es una pista ciertamente progresiva, donde se nota que el grupo experimenta con nuevos sonidos y mezclas. La batería marca un ritmo acelerado y complejo desde el primer momento, junto con la melodía del sintetizador de Banks. En 1:10 llegamos a lo que podríamos considerar la sección estribillo, por ser la que se repite periódicamente con exactitud. Me resulta muy difícil describir esta pista, pues los sonidos que Genesis adopta aquí son tan electrónicos que es difícil transmitir cómo suena. En 2:58 comienza una larga, larguísima,coda que se extiende hasta el final de la pista (5:04), añadiendo nuevos sonidos con cada iteración, incluyendo -aunque no exclusivamente- más sintetizadores y una guitarra eléctrica distorsionada. En general me resulta una pista interesante aunque no tan completa como otras pistas instrumentales de antaño.


En general, este álbum me ha resultado muy grato de escuchar, pues fue el primero que escuché de Genesis cuando era pequeño. Objetivamente hablando no creo que sea uno de los mejores álbumes de Genesis, aunque sí uno de los más peculiares junto con Abacab. El sonido que escuchamos en él no lo había escuchado nunca, se trata de un sonido eléctrico y acelerado, pero melódico al mismo tiempo. Me resulta muy difícil calificarlo a nivel personal. En principio había pensado ponerle cuatro estrellas, pero pensando que álbumes como A Trick Of The Tail, ...And Then There Were Three... o Nursery Cryme tienen esa misma calificación y me gustan mucho más que Invisible Touch, tengo que rebajarle un escalón, quedando pues en TRES ESTRELLAS. Respecto a las críticas que muchos fans de la era Peter Gabriel hacen de este álbum y del siguiente, We Can't Dance, tengo que decir que el carácter progresivo nunca lo ha perdido Genesis hasta el momento. Siempre en mayor o menor medida ha sido un grupo de rock progresivo.

Sin nada más que añadir, me despido hasta el siguiente álbum, We Can't Dance. Espero no tardar tanto en reseñarlo como he tardado con Invisible Touch.